Un secreto compartido desde que nacieron. Él, el primero de todos, incluso, el único. Cuántas veces se habrá escrito su nombre en diarios y libros de texto, cuántas veces se ha sufrido en silencio, cuántas veces tantas cosas sin ningún beso... Casi tantas como tanta inocencia y pureza de un amor de verano, primavera, otoño e invierno. De años completos. Un amor desde siempre, sin conocerlo.
Siempre creyó que huía por miedo a ser la única en sentirlo, una cobarde que hubiera esperado lo que hiciese falta si hubiera sabido que era recíproco. Lo único que quería era demostrar lo que sentía, y en su lugar, se marchó. Nunca hubo intenciones de volver, cuando se huye es para siempre, pero nunca se había sentido tan querida al estar de nuevo. Tan queridos sin saberlo, sin creérselo. Incluso aún le resulta extraño. Y familiar. Y cálido. Y...
Sin poder parar de sonreír y sin poder parar de llorar. Como antaño. Como una niña con sonrisa de ángel
Historias,
la suya.
La más bonita.
Gracias.
¡Cuanto de nostalgia, de dolor y cuanto de vida en estas letras!... Tu vida , mi vida, la vida de todos está llena de adioses y bienvenidas.
ResponderEliminarcon tu permiso me he hecho seguidora de tu blog
Besito volado